Esta decisión dificultará en gran medida una alta participación, uno de los principios que se consignan, precisamente, en la Orden de convocatoria

El Gobierno de Cantabria, a través de la Consejería de Economía que preside Ángel Agudo, ha contestado a la petición que realizó la Federación del Comercio de Cantabria COERCAN de instalar urnas en las cabeceras de comarca de nuestra región, con motivo de las próximas elecciones camerales, con una simple reproducción de la Orden de convocatoria de las mismas en la que se dice que sólo habrá un único Colegio Electoral en la Plaza de Velarde de Santander.

De esta manera, y en contra de lo que la propia Orden propugna, que no es otra cosa que favorecer la máxima participación en estos comicios, el Gobierno mantiene todas las dificultades posibles, tanto económicas como temporales, y obliga a los comerciantes de fuera de la capital que no hayan solicitado el voto por correo –que también acarreaba gastos- a desplazarse en persona a la sede de la Cámara para ejercer su derecho.

En la respuesta ni siquiera se valora la posibilidad de un estudio de viabilidad u otras opciones, sino que, simplemente, se hace un copiado y pegado de la convocatoria, demostrando un escaso interés ante una petición que no es otra cosa sino reflejo de numerosas llamadas de puntos distantes, como Potes, Reinosa, San Vicente o Castro Urdiales, de comerciantes que deseaban participar en el proceso sin sufrir perjuicios por hacerlo.

Por poner un ejemplo, un empresario de esta última localidad que quiera votar presencialmente empleará una media de dos horas, en el mejor de los casos, entre el desplazamiento de ida y vuelta, el aparcamiento y el voto. En lo económico se estaría hablando de unos 20 euros de combustible, más estacionamiento u OLA.  

No obstante, y pese a la poca consideración, las dificultades y al agravio comparativo para los empresarios de fuera de Santander, COERCAN quiere animar a todos los censados a participar en las Elecciones porque su voto es muy importante y puede tener mucho peso en la composición final de la Cámara y en las decisiones futuras que en ella se tomen.

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