Tras patrocinar conciertos veraniegos, ahora la “ocurrencia” se llama curso de experto en comercio en la Universidad

La Federación del Comercio de Cantabria – COERCAN, patronal de este sector en la región y que agrupa a 40 asociaciones y 3.000 empresas, no sale de su asombro tras la carrera hacia adelante iniciada por la Fundación Comercio Cantabria con el apoyo del ex consejero de Economía, Ángel Agudo.

Tras descubrir la pasada semana que con dinero público –desde Peña Herbosa se le han dado 3 millones de euros para actividades- se patrocinaban conciertos que poco o nada iban a influir en las ventas, hoy se descubre que el siguiente paso en aumentar el dispendio es un curso de experto en comercio minorista ofrecido a través de la Universidad de Cantabria.

Esta iniciativa, por la que se cobrarán hasta 2.500 euros por persona, nace viciada de inicio, como ya lo hizo la propia tarjeta Comercio Cantabria, y por el mismo motivo: se toman supuestas acciones para el sector pero no se cuenta con él a la hora de llevarlas a cabo.

En este caso, además, el asunto es sangrante, porque se han dilapidado millones de euros en publicidad y campañas que no han revertido prácticamente en los comerciantes y, en época de crisis, cuando muchos están perdiendo dinero para no echar trabajadores a la calle, se les ocurre montar un curso universitario en horas en las que los empresarios y sus asalariados están luchando por su pan.

Para más inri, además, los comerciantes deberán pagar por recibir este curso. Un completo despropósito. ¿No queda dinero público en la Fundación para hacerlos gratis, por lo menos?

A través de diversas fórmulas ya se ofrecen a los comerciantes cursos especializados y gratuitos que les permiten afrontar el día a día en las mejores condiciones. COERCAN, sin ir más lejos, imparte, en sus diversas asociaciones, más de cincuenta cada año. Si ya hay herramientas de sobra que funcionan, no se entiende el despilfarro en otras de dudoso éxito.

A COERCAN también le gustaría saber el coste que va a tener el vino español anunciado para la presentación de esta iniciativa. No deja de ser llamativo, además, que el nuevo presidente de Cantabria, Ignacio Diego, suspenda el ágape en su toma de posesión para ahorrar dinero y que, con dinero público, se ofrezca un festín para esto.

No deja de sorprender, igualmente, la presencia entre la organización de las Cámaras de Comercio, tanto la de Cantabria como la de Torrelavega, que desde principios de este año sólo representan a las empresas que, voluntariamente, hayan expresado su deseo de continuar dentro de ellas. ¿Cuántas lo han hecho hasta ahora?

Por último, la Federación del Comercio de Cantabria se muestra expectante ante el plantel de expertos que podrían estar en la nómina de profesores del curso y, por supuesto, también de los honorarios que van a recibir por ello.